sábado, 21 de agosto de 2010

Dentro de mi mente.

No puedo decirte ni lo que se siente, me sofoco, me ahogo y aún así me hundo un poco más.
Apesar de ser otro día, al levantarme aún me siento dormida, levantar la cortina y seguir viendo lo mismo que hace años. ¿Qué sentirias?
¿Qué sentirias si justo después de despertar la gente que más apoyo te da llega llorando contigo?
¿Qúe sentirias al ver que no puedes hacer nada? Después de tantos años, tantas cosas aprendidas, tantas batallas perdidas, tantas ganadas, después de haber aprendido a usar tus manos y cabeza en conjunto no puedes hacer nada.
Ni me molesto ya al oir a las personas que tienen todo más fácil quejarse de lo más sencillo del mundo. Ya me acostumbré, ya sé como actuar, que decir, que hacer, cómo moverme. La gente suele hacer una tormenta en vaso de agua, no sé ni cómo, pero se complican a un punto que se me hacía posible de pensar.
¿Tú que harías al tener que cuidar de quien lo necesita, cuando aveces nadie se molesta nisiquiera por preguntar cómo estás? Justo cuando te estás quemando, toda la gente esconde el agua, no hace nada.
¿Difícil eh? No tanto cómo parece. Cuesta más verte y que ni te importe. Peor aún que ni te des cuenta de cuanto me importes. Es así y así parece quedarse, estar sola y tenerte fuera de mi alcance.

No hay comentarios:

Publicar un comentario